La desigualdad de género se mantiene en la política

Las mujeres representan el 51 por ciento de la población del país. Sin embargo, en las últimas elecciones solo sumaron el 44 por ciento en las estadísticas del empadronamiento, en contraste con los hombres, que alcanzaron el 56. Su participación política se redujo aún más en las votaciones, pues solo el 42 por ciento hizo uso de su derecho a elegir, comenta Catalina Soberanis, consultora del Programa de Naciones Unidas. Soberanis, quien se basa en el estudio “Más Mujeres, mejor Política del Sistema de Naciones Unidas y el Fondo Global de Población”, estima que la participación de las mujeres suma, en conjunto, el 19 por ciento en los 3 organismos del Estado. De ese porcentaje, un 29 por ciento se encuentra en un puesto del Organismo Judicial. Después de 30 años de democracia, observa Soberanis, ex presidenta del Congreso, la presencia de las mujeres en la legislatura ha oscilado entre un 5 y un 10 por ciento. Guatemala tiene el menor porcentaje de diputadas, comparadas con las costarricenses, que suman un 38.6 por ciento en la asamblea. La baja autoestima, la falta de educación, la vigencia de sistemas patriarcales, la costumbre que sean los varones quienes dominen el ámbito público, la poca concesión de espacios y las responsabilidades familiares son algunas de las razones de la ausencia femenina en el ámbito político. “En las elecciones pasadas, la mitad de los partidos con representación parlamentaria no tuvieron mujeres diputadas”, agregó. Walda Barrios, socióloga y feminista candidata a la vicepresidencia de la alianza URNG-Maíz insiste en que es necesario impulsar una política con enfoque de género. Si el acceso a cargos públicos para las ladinas es difícil, para las indígenas lo es aún más. De acuerdo con Carmen Quiej, de la Asociación Política de Mujeres Mayas, Moloj, solo una mujer maya fue electa como alcaldesa y una más como diputada. (elPeriodico.com.gt 27/06/07)